Las 5 D del diálogo en pareja.

Amar es escuchar, escuchar es dialogar, dialogar es vaciar el corazón  mutuamente para seguir llenándolo de amor real.

En julio del 2015 Hellen Saray y yo viajamos a México, prestaba el servicio en la coordinación latinoamericana de jóvenes de la Renovación Carismática Católica, y se llevaría a cabo el Encuentro Carismático Católico Juvenil  en Guadalajara. 
Antes de salir de Costa Rica tuvimos una discusión  de pareja, sinceramente no íbamos en un buen momento, de camino conversamos, arreglamos, le pedí disculpas a Hellen pues el mayor responsable  de lo sucedido era yo,  y  nos dispusimos  a vivir el encuentro abiertos a las sorpresas de Dios, y de verdad nos sorprendió.

En un momento dado del encuentro me acerque junto con Hellen  a un buen obispo amigo Monseñor Luis Morao, obispo emérito de la diócesis de Chalatenango en El Salvador , asesor latinoamericano de la Renovación Carismática Católica , mi intención era presentarle a Hellen , en ese momento mi novia, hoy desde hace un mes y 4 días mi esposa.

Cuando le presente a Hellen para que Monseñor Luis la conociera  sucedió algo hermoso que quedo grabado en nuestra mente y corazón, el  junto nuestras manos  y puso las suyas sobre las nuestras  y nos dijo :  Nunca olviden las 5 del diálogo : diálogo largo, diálogo sincero, diálogo respetuoso, diálogo profundo,diálogo serio.  Y reafirmándonos esta clave del amor  con su característico humor y alegría nos dijo: no lo olviden , diálogo , diálogo , diálogo !

Para cultivar y hacer fructificar el amor es vital el dialogar, para mejorar nuestro diálogo les comparto una reflexión a partir  de  este consejo del buen obispo Luis Morao, 5  D del diálogo :

1. Diálogo largo: esto es dedicar tiempo, buen tiempo para que haya un resultado bueno.  Los diálogos largos hacen cortas las distancias en la pareja. Se trata de cantidad, es la mejor inversión de tiempo en la relación de pareja, no des sobras de tu tiempo, la persona amada no merece tu tiempo libre  sino que seas libre en el tiempo en muchos momentos para dialogar. Diálogos cortos debilitan el amor.

2. Diálogo sincero: el amor y la verdad son inseparables,  la sinceridad es hablar y actuar sin disimulación , sin nada que ocultar, sin mascaras.  La sinceridad es  clave de una sana afectividad, tu pareja tiene que ser tu mejor amigo, tu confidente. No se oculten nada, dialoguen siempre con claridad.

3.Diálogo respetuoso:  somos diferentes, el amor no anula tu irrepetible originalidad, al contrario es el arte de ser dos sin dejar de ser uno, de ser uno sin dejar de ser dos, esto implica mucha  tolerancia, respeto en las diferencias de criterios. Nunca pierdan de vista el respeto, el diálogo  verdadero es sereno, nunca con ofensas, ira e intolerancia.  El respeto es no perder de vista la dignidad de la otra persona. Sin respeto no hay diálogo, dialoguen respetuosamente.

4. Diálogo profundo : el diálogo verdadero es abrir mi mundo interior al otro, mis sentimientos , pensamientos, mi pozo interior  como lo hizo la mujer samaritana con Jesus junto al pozo de Jacob (San Juan 4). El diálogo entra en rutina cuando se queda en cosas superficiales. Hoy es común que tanto el hombre como la mujer trabajen , y con frecuencia el dialogo diario se reduce a cosas superfluas, las mismas preguntas y las mismas respuestas.  Cuidado, que el dialogo sea profundo, expresen cada día lo que hay en sus corazones, los sentimientos , emociones , pensamientos, cada día tiene sus propios afanes, dificultades, vivencias , situaciones, el diálogo superficial lleva a retener lo que realmente se siente o piensa y esto puede convertirse en una olla de presión que tarde o temprano explota.

5. Diálogo serio:   esto esta muy relacionado al anterior, el diálogo superficial es un diálogo que se convierte en algo informal , poco serio , si el diálogo diario se reduce al clima,  a los programas de tv ,  al que almorzaron, es decir se queda en la superficie, esto lleva a la rutina , a no valorar el sentido del diálogo, a no darle propósito. Diálogo serio no se refiere a un dialogo rígido y sin alegría , no por el contrario , la vida es una aventura, amar es una aventura diaria, cada semana , cada mes, cada año hay tantas circunstancias , retos , desafíos, situaciones a superar, a afrontar, sueños , anhelos, proyectos, que el dialogo es el medio determinante  para mirar juntos cada día en una misma dirección , para llegar a acuerdos , decisiones, para dar pasos y seguir adelante, esto es el diálogo serio , el diálogo maduro que siempre desemboca en sacar adelante la hermosa aventura de la  relación de pareja, de amar.


Quisiera terminar este articulo  con dos numerales de la exhortación apostólica del Papa Francisco Amoris Laetitia (Alegría del Amor) precisamente sobre la importancia del diálogo en el amor :

136. El diálogo es una forma privilegiada e indispensable de vivir, expresar y madurar el amor en la vida matrimonial y familiar. Pero supone un largo y esforzado aprendizaje. Varones y mujeres, adultos y jóvenes, tienen maneras distintas de comunicarse, usan un lenguaje diferente, se mueven con otros códigos. El modo de preguntar, la forma de responder, el tono utilizado, el momento y muchos factores más, pueden condicionar la comunicación. Además, siempre es necesario desarrollar algunas actitudes que son expresión de amor y hacen posible el diálogo auténtico.

137. Darse tiempo, tiempo de calidad, que consiste en escuchar con paciencia y atención, hasta que el otro haya expresado todo lo que necesitaba. Esto requiere la ascesis de no empezar a hablar antes del momento adecuado. En lugar de comenzar a dar opiniones o consejos, hay que asegurarse de haber escuchado todo lo que el otro necesita decir. Esto implica hacer un silencio interior para escuchar sin ruidos en el corazón o en la mente: despojarse de toda prisa, dejar a un lado las propias necesidades y urgencias, hacer espacio. Muchas veces uno de los cónyuges no necesita una solución a sus problemas, sino ser escuchado. Tiene que sentir que se ha percibido su pena, su desilusión, su miedo, su ira, su esperanza, su sueño. Pero son frecuentes lamentos como estos: «No me escucha. Cuando parece que lo está haciendo, en realidad está pensando en otra cosa ». «Hablo y siento que está esperando que termine de una vez ». «Cuando hablo intenta cambiar de tema, o me da respuestas rápidas para cerrar la conversación».


Espero este articulo sea de bendición, Dios les bendiga.

Francisco Javier Araya.
franciscojaviertxc7@yahoo.com